Vengo de un lugar donde no existe la web y sólo hay apps. La app que más uso es una red social orientada a discusiones sobre distintos temas, pero también uso bastante una app para ver noticias, y una app para acceder a un juego de rol multiusuario.
Este mundo de apps es extremadamente flexible y variado. Cada app puede tener su propia forma de interacción, sus propios tipos de letra y colores, y sus propios gráficos. Por ejemplo, la última app que instalé, la del banco, está muy bien hecha.
En términos de funcionalidad es lo típico, ver el estado de cuenta, hacer transferencias, etc. pero visualmente está mucho mejor lograda que las otras apps.
La app del banco no muestra solamente texto en distintos colores, sino que tiene elementos gráficos incluyendo el logotipo del banco. Además, la interacción es mucho más fácil porque se puede usar el mouse en vez del teclear cada comando con un número. Me imagino que con el tiempo las otras apps también se verán así, es obvio. Con el tiempo habrán más y mejores apps, una app para cada cosa que necesitemos hacer :-)
El año es 1991, y mientras los geeks del mundo disfrutamos de este mundo de "apps", Tim Berners-Lee ya ha escrito el primer servidor web y el primer navegador. En los próximos 4 años nuestro mundo de "apps" implotará y desaparecerá. El mundo de las "apps", que en realidad se llamaban BBS (Bulletin Board Systems), dará paso a la web.
El típico fondo negro dará paso a un fondo gris claro, y luego a un fondo blanco. Los tipos de letra monoespaciados darán paso a las tipografías proporcionales. Los módems de 9,600 bits por segundo serán reemplazados por módems ADSL. El mundo de los servicios de información en línea será totalmente diferente.
Las BBS de principios de los 1990s eran, de alguna manera, mucho más que la web y, también, mucho menos que la web.
Las BBS eran más que la web porque detrás de cada web había una persona u organización claramente identificable (por un número de teléfono, nada menos), incluyndo un operador de sistemas (sysop) con nombre y apellido. Además, conectarse a una BBS era realmente "entrar" en un lugar nuevo: la BBS podía tomar control completo de una parte de tu pantalla y diseñar una experiencia interactiva totalmente nueva que sólo estaba limitada por el presupuesto de desarrollo de cada BBS. "Entrar" a una BBS era una experiencia que podía ser mucho más absorbente que "visitar" un sitio web.
Las BBS eran también mucho menos que la web porque, si una BBS quería referirse a información en otra BBS, tenían que darte un número de teléfono y una serie de instrucciones (llama al 7-XXX-XXX, luego elige la opción 3 y luego la 1, luego busca "manual de usuario"). No existía una manera uniforme de referirse a un recurso de información, por lo cual tampoco existían realmente buscadores que indexaran toda la información disponible. Tampoco era muy fácil interactuar con más de una BBS al mismo tiempo, Además, a pesar de que existían algunas herramientas libres, crear una BBS era un proyecto que sólo podía emprender una empresa o un geek realmente dedicado.
El mundo de las BBS nos permite imaginar lo que sería un mundo en que sólo hay apps y la web ha muerto, un mundo que ha sido anunciado incontables veces en los últimos años y de todas las maneras posibles. Para mi, esta especulación en sí misma no es un problema, la muerte de una tecnología se anuncia cientos de veces, algunas tecnologías son notoriamente resistentes (e.g. la radio), y eventualmente su muerte, cuando llega, rara vez es por los motivos que se había previsto.
El problema de la conversación sobre "la web ha muerto, vivan las apps", creo yo, es que la liviandad con que se analiza un posible mundo post-web muestra que no estamos poniendo atención ni siquiera al nombre de lo que estamos analizando: la WEB. Una red, un entramado de información que es posible porque cualquiera puede agregar un hilo más y conectarlo con el resto con un simple enlace.
Un mundo de apps, sin importar lo coloridas, interactivas y animadas que fuesen, sería un tremendo paso atrás. Sabemos qué significa tener barreras de entrada más alta para los que quieran ofrecer información on-line, más dificultades para localizar información, y más fragmentación de la experiencia del usuario. Se llamaban BBS, y las dejamos atrás hace más de veinte años.
Publicado en Manzana Mecánica.