Este escrito está dirigido a tí, que,
la última vez que te preguntaron por tu religión, dijiste que eras cristiano. Tengo algo que quiero decirte. Tengo una invitación para tí. Pero necesito explicarte el por qué de esta invitación primero.
Los católicos, junto con protestantes, anglicanos, ortodoxos y otras denominaciones menores, juntos constituyen la fe Cristiana, que agrupa más o menos a 1/3 de la población del mundo. Este gráfico muestra los mayores grupos religiosos (o irreligiosos) que existen en el mundo y qué fracción de la población pertenece a cada uno. Fíjate que ninguno tiene una mayoría absoluta.
Estos grandes grupos no son homogéneos. No todos los cristianos creen en las mismas cosas, por ejemplo los mormones creen que en general los pecados deben ser confesados directamente a Dios, mientras que católicos y los ortodoxos creen que todos los pecados deben ser confesados a un sacerdote. Los musulmanes chíitas creen que el directo sucesor de Mahoma es su yerno y primo Alí. Los musulmanes suníes, que son la mayoría, creen que el directo sucesor de Mahoma es el califa Muawiya, quien derrotó a Alí en la batalla por la sucesión de Mahoma. De todos modos, aunque difieran en los detalles, éstas religiones están de acuerdo en las cosas fundamentales, por lo que se pueden agrupar como en el gráfico de más arriba.
Solamente uno de estos grupos está en lo correcto, al menos en las cosas fundamentales. O bien Mahoma es el profeta enviado por Dios, o bien no lo es. Ambas cosas no pueden ser ciertas simultáneamente. O bien Jesús nació de una mujer virgen, o nació de una mujer que ya había tenido sexo con alguien, posiblemente con su esposo. O bien Buddha alcanzó la iluminación, o no la alcanzó. De nuevo, estamos hablando de cosas centrales para cada religión, no de cosas accesorias.
De modo que las principales religiones son
mutuamente incompatibles. Por más enfáticos que suenen todas, sólo una está en lo cierto. Claro que se admiten excepciones, por ejemplo la iglesia católica enseña que excepcionalmente una persona fuera de la iglesia puede salvarse, tal como una persona puede recorrer una calle sin conocer su nombre. Pero la salvación fuera de la iglesia católica está reservada a casos muy puntuales. Si los cristianos están en lo correcto, y el día del juicio final ocurre mañana, 2 billones de personas en la tierra podrán salvarse, y la enorme mayoría de los otros 4 billones se irán al infierno.
El problema mayor de esta división entre los que se salvan y los que se van al infierno, es que
la religión de una persona está casi totalmente determinada por su lugar de nacimiento. En América, la gente es mayoritariamente católica o protestante, principalmente dependiendo de si nació en una ex-colonia Inglesa, Holandesa, Portuguesa o Española. En Rusia y Europa del Este, la gente religiosa es mayoritariamente ortodoxa, y en el Medio Oriente y el norte de África, la gente religiosa es mayoritariamente musulmana. Tú eres cristiano, lo más probable es que lo seas porque naciste en un país de mayoría cristiana, no porque hayas tenido una revelación personal sobre la verdad de Dios.
Católicos moderados
Posiblemente te consideras a tí mismo(a) un
católico(a) moderado(a). Esto puede querer decir muchas cosas, pero típicamente se reduce a dos. Primero, no vas todos los domingos a misa ni observas "religiosamente" todas las obligaciones de un católico y, segundo, no crees todas las enseñanzas de la iglesia. La mayoría de los católicos son así y no hay nada de malo en ello. Respecto a lo primero, porque hay cosas mucho más interesantes que hacer un día domingo en la mañana. Respecto a lo segundo, porque los preceptos de la iglesia católica son muchísimos y muy variados como para creer en todos.
Un ejemplo típico de esto es la asunción de María después de su muerte, por causa natural. La carne y los huesos de la madre de Jesús, de acuerdo a la iglesia católica, no se convirtieron en polvo como la carne y los huesos de su esposo José y del resto de los mortales. Al igual que Jesús (y solamente ellos dos: no Juan, no Pedro, ni ninguno de los otros),
María al morir ascendió al cielo. Esto no está en la biblia. Lo estableció posteriormente la tradición, a lo largo de los años, y fue declarado un dogma inefable en 1950 por Pío XII. Forma parte de los "misterios de fe" (léase: "cosas que no creemos ni nosotros mismos") más difíciles de tragar.
Supongo que tú tampoco te tragas el libro completo de las enseñanzas vaticanas. Al igual que el resto de los católicos,
elijes en qué creer. Hay cosas que aparecen en la biblia que se entienden en sentido figurativo, y otras que se deben entender en sentido literal. Ciertas partes de la biblia, como por ejemplo, "mujer, sométete a tu marido, como al señor" (Efesios 5:22), son dichas en forma figurativa, mientras que otras por ejemplo, "no matarás", "respetarás a tu padre y a tu madre", son dichas en forma literal. Otras partes de la biblia, como por ejemplo "vende todas tus posesiones y dále el dinero a los pobres" (Mateo 19:21), tienen una interpretación que puede ser figurativa o literal dependiendo de cuántas posesiones tengas.
Además, las cosas en las cuales tú crees no provienen todas del cristianismo.
La reencarnación es una idea muy atrayente que tiene adeptos en todas las religiones. La reencarnación tradicionalmente es la creencia de que al morir podemos renacer en forma amnésica en un animal o en otro humano, dependiendo de nuestras acciones. La adaptación occidental de la reencarnación, fuertemente influída por la idea cristiana de que los animales no-humanos no tienen alma, sólo admite reencarnaciones en otros humanos. De todas formas es una idea que trae consuelo y tiene muchos adeptos.
El problema de declararse católico, cristiano, musulmán, etc., sin serlo realmente, o de bautizar a los niños en una religión sin que los niños o niñas tengan idea de nada, es que
le entrega poder a un grupo muy peligroso. Me refiero a gente que utiliza estas estadísticas para hablar en nombre tuyo a los presidentes, a los senadores, a los militares, a los médicos, a los abogados, a los economistas, etc. Gente que toma esa declaración que haces tú de "ser católico" y la convierte en "obedecer a la iglesia católica".
Gente peligrosa
Al declararte católico le das más base, poder y municiones todavía a personas muy distintas a tí, que creen en miles de cosas en las que tú no crees, que posiblemente no han experimentado nunca el amor de un hombre o una mujer en libertad y sin culpas. Al declararte católico estás dandole más cuerda a gente que está muy loca, que debería estar en un asilo de ancianos, mirando los pajaritos y añorando sus tiempos mejores en las juventudes Nazis.
La historia se ha repetido una y otra vez. Hace unos pocos cientos de años la iglesia tenía mucho más poder que ahora. Cuando tuvieron el poder, lo usaron para quemar a los que eran distintos. Autorizaron la tortura. Encerraron a Galileo cuando tenía casi 70 años y lo tuvieron bajo arresto domiciliario hasta su muerte 9 años después por decir que la tierra se movía en torno al sol. Pero eso fue hace 400 años, y puede argumentarse que la iglesia de ahora es mucho más moderna. De hecho en parte lo es. Después de un desastroso y largo historial de alinearse siempre con la idea científica perdedora, actualmente la iglesia católica no condena la evolución de Darwin. Un gran avance.
La iglesia católica durante toda su historia ha avalado las mayores matanzas. Nunca se ha reconciliado con su padre intelectual que es el judaísmo (la mitad de la biblia cristiana, el antiguo testamento, es la biblia judía), de modo que habló muy tarde contra los Nazis, mirando hacia otro lado mientras mataban judíos. También tuvo un gran enemigo en el marxismo comunista, y aplicó la tesis de que "el enemigo de mi enemigo es mi amigo", alinéandose con los enemigos del marxismo a pesar de sus métodos. La iglesia siempre ha estado del lado de los poderosos, y pocas veces del lado de los pobres.
Cristianismo personal
Una opción para alguien que ha nacido en un país cristiano, pero que no cree en todo lo que dice las iglesias, es tener una forma de cristianismo personal, o declararse un
"simpatizante" de una religión. Uno puede ser "simpatizante" de un partido político sin pertenecer a él, como por ejemplo podría ser "simpatizante" del Partido Socialista sin ser un miembro del Partido Socialista. De hecho, uno podría ser simpatizante de varios partidos políticos al mismo tiempo, tomando de cada uno lo mejor y sintetizando una idea propia de la mejor forma de distribuir el poder y de administrar un país, en este caso.
Esta analogía no es, sin embargo, válida. La situación es más parecida a la del fútbol, en que uno no puede ser "simpatizante" al mismo tiempo del Barça y del Real Madrid y vivir en España, porque ambos equipos mantienen una enconada rivalidad y son incompatibles. Por el mismo tiempo, uno no puede ser cercano al catolicismo y al budismo y vivir en la Tierra. Tal vez podría serlo si viviera en Marte.
Otra opción es inventarse una religión propia, en el caso del cristianismo, relacionarse con Jesús de manera directa. Lamentablemente esto tampoco es posible. Jesús no escribió nada. No dibujó una pintura, no hizo un grabado. Posiblemente hablaba Arameo, pero el nuevo testamento de la Biblia fue escrito originalmente en Griego, varios años después de la muerte de Jesús, y salpicado de expresiones en Arameo por aquí y por allá. Las representaciones de Jesús varían según las culturas también, para los nazis era ario, para los europeos caucásiso y tal vez en algunas partes de áfrica,
negro, ¿por qué no?.
Y si tienes tu propio cristianismo, ¿qué haces con los dogmas centrales?. Por ejemplo, Jesus es el
cordero de Dios. Los judíos sacrificaban corderos a Dios. Jesús era el cordero que Dios sacrificó a él mismo. Lo hizo porque si no la humanidad estaba perdida. Todos los humanos pecan y sumado al pecado original, tienen una deuda moral tan enorme que una persona normal casi seguro se irá al infierno. Pero el sacrificio de Jesús fue tan grande que podemos recibir parte de su crédito moral (si lo aceptamos) y de ese modo entrar al cielo. Esta contabilidad moral es central al cristianismo, es la razón por la cuál Jesus vino a la tierra, a balancear las cuentas morales de la humanidad. Es imposible tener un cristianismo "hecho en casa" sin incluír éste y otros aspectos centrales de la cristiandad masiva.
Invitación
Después de todo esto, la invitación es a
contemplar la posibilidad de que éste sea un mundo natural. Un mundo natural es un mundo donde no hay cosas sobrenaturales. El cielo es el cielo, un lugar de aire y pájaros, no de ángeles. Debajo de la tierra hay rocas calientes, no demonios. Los vivos están vivos, y los muertos, muertos. Esto se denomina una visión
naturalista del universo, en que todo lo que hay son fenómenos naturales.
Es importante ahora decirte un par de cosas que
no son parte de la visión naturalista. Primero, que el universo sea natural no significa que todo se pueda ver y tocar. Hay cosas que no se pueden ver, como la amistad o el amor, y que sí existen. Segundo, que el universo sea natural no significa que todo se pueda comprender. Hay cosas que no se pueden comprender y
hay cosas que no se pueden demostrar.
Todos los dioses: Zeus, Alá, Thor, Yahvé, etc. vienen del mismo lugar: de la mente de los hombres que los crearon. El hombre ha existido como tal por unos pocos cientos de miles de años, pero sólo hace pocos miles de años que ha organizado grandes religiones. La religión es un fenómeno natural también, fruto de una fase de la evolución cultural del hombre. Las iglesias siguen teniendo mucha importancia en los países en desarrollo, pero en los países desarrollados (a excepción de Estados Unidos), van
perdiendo importancia. Esto también es un fenómeno natural.
Imagina un mundo sin religión. Sin religión, la gente buena hace cosas buenas, y la gente mala hace cosas malas; para que la gente buena haga cosas malas, se necesita a la religión. Una vez que alguien te lleva a creer cosas absurdas, te puede llevar a hacer cosas terribles. En los últimos 20 años los ataques suicidas contra civiles se han hecho cada vez más frecuentes. Detrás de ellos hay fanatismo religioso islámico, al que no podemos responder con fanatismo religioso cristiano.
Una visión del universo como algo natural abre muchas puertas y no cierra ninguna, salvo la de la superstición. La humanidad a estas alturas ha dejado de creer en la mayoría de los dioses en que creía antiguamente. La invitación es a ir un dios más allá.
Fuentes: Enciclopedia Británica, Pew research, Boston Globe, Vaticano, Marcus Brigstocke, JSCyL, Wikipedia: Fanon, Cogulus, ChaTo.cl, The Root of all Evil.