Hedwig and the Angry Inch

Hedwig and the Angry Inch es un musical de 1998 y una película estrenada en el año 2001. Ambos fueron escritos, dirigidos y protagonizados por John Cameron Mitchell. La historia se centra en un transexual alemán, Hedwig que recorre los Estados Unidos con su banda de Glam Rock The Angry Inch. La banda toca una serie de conciertos en locales de bajo perfil, persiguiendo al famoso y exitoso Tommy Gnosis, a quien acusan de haberles robado todas sus canciones.

"¿Cómo pudo un mariquita de Berlin Oriental Comunista convertirse en el internacionalmente ignorado peluquero de canciones, que se encuentra apenas de pie frente a ustedes?" dice Hedwig. Y comienza a contar como durante la Guerra Fría se enamora de un soldado norteamericano, y para poder casarse con él, se realiza una operación de cambio de sexo que resulta un desastre:

Mi operación de sexo se arruinó // mi ángel guardián se quedó dormido en su turno // ahora tengo una ingle de muñeca Barbie // ¡Tengo una pulgada enfadada!

Hay situaciones muy cómicas durante la película, principalmente causadas por el tipo de espectáculo de la banda de Hedwig, que es rock muy potente y con letras muy explícitas, que chocan con lo prosaico de los comensales de las heladerías y restaurantes de segunda donde deben tocar. También hay momentos que tocan profundamente, como una historia sobre el origen del amor basada en un cuento de Aristófanes.

La música de la película es excelente y las canciones hechas a la medida de la voz de su protagonista. Si te gustaron "Transamérica", "Priscilla, reina del desierto", y en general el cine gay y bizarro, no te puedes perder esta obra de arte.

Ver: Wikipedia: Hedwig and the Angry Inch

Todos los dioses vienen del mismo lugar

Madalyn Murray O'Hair escribió en 1978 "¿Sabías que todos los dioses vienen del mismo lugar?" un libro para niños ilustrado por Joe Kirby. Comienza así:

"Había un tiempo en que la gente era como los niños. No sabían leer ni escribir. Nunca iban al colegio. No sabían ni siquiera cómo construir casas como la casa en que tú vives. No sabían qué causaba la lluvia, el trueno, ni los relámpagos.Y si pescaban un resfríado o se enfermaban, no sabían por qué ni cómo curarse."

Pero esa gente tenía una gran habilidad: podía pensar, podía imaginar. Utilizó su pensamiento para resolver muchos de esos problemas, y cuando el pensamiento no fue suficiente, usó su imaginación. Imaginó dioses a su imagen y semejanza, seres omnipotentes que movían los hilos de las cosas inexplicables. Nuestros antepasados también sufrían, y tenían miedo de lo desconocido, y miedo de morir, así que inventaron elaboradas fantasías que les dieran la esperanza de vivir para siempre. Las mejores de esas fantasías han perdurado, se han ido mezclando a lo largo del tiempo y forma el canon de las religiones establecidas.

Christopher Hitchens lo pone así:

".. tenemos miedo de la oscuridad y tenemos miedo de morir, y creemos en la verdad de libros sagrados que son tan estúpidos, tan inventados, que un niño puede, y los niños pueden (como se ve por sus preguntas) ver a través de ellos."

Pero ya no necesitamos más fantasías, menos aún que unos pocos lucren con ellas ofreciendo falsas esperanzas a los más débiles. Como los niños abandonan sus juguetes y muñecas cuando crecen, nosotros podemos dejar atrás el falso consuelo de fantasías infantiles, y buscar un camino de felicidad que conduzca a la madurez de nuestra especie.

Video de la lectura de "¿Sabías que todos los dioses vienen del mismo lugar?" (sátira de un programa para niños):

Comparando países

¿Cómo podemos comparar la cultura de dos países? Geert Hofstede analizó una base de datos de empleados de IBM, una corporación presente en más de 70 países, buscando diferencias en la cultura de los distintos países.

Para cada país, se extrajeron 5 rasgos:

  • Distancia de poder(power distance index): a mayor número, más diferencia entre las distintas clases. Por ejemplo Alemania tiene un puntaje de 35, mientras que Chile tiene un índice de 63 y Guatemala de 95.
  • Individualismo: a mayor número, más importante es el individuo respecto al colectivo. Un país como Estados Unidos, por ejemplo, tiene un puntaje de 91, Alemania 67 y China tiene un puntaje de 20.
  • Masculinidad: indica el grado en el cual los valores más asociados estereotípicamente con el hombre (éxito material, centrarse en sí mismo, poder, fuerza, etc.) son más importantes que los valores asociados con la mujer (importancia de las relaciones, calidad de vida, etc.). Japón tiene un puntaje de 95 siendo la sociedad más prototípicamente "masculina" de las ranqueadas, mientras que Suecia tiene un puntaje de 5, siendo la sociedad más prototípicamente "femenina" en el ranking.
  • Aversión por la incertidumbre: esto indica qué tanto una sociedad evita situaciones inciertas o con poca estructura. Grecia en esta escala tiene un índice de 112, mientras que en Singapur la incertidumbre es mucho menos tolerada, con un puntaje de 8.
  • Orientación al largo plazo: mide qué tan importantes son la persistencia y la tradición respecto a los valores de más corto plazo. En este sentido China tiene un índice de 118 y el índice es más alto en países asiáticos que en occidente donde por ejemplo Noruega tiene un puntaje de 20. Lamentablemente este puntaje está disponible sólo para unos pocos países.
El sitio oficial de Geert Hofstede tiene una herramienta para comparar países. Por ejemplo si comparamos Chile y España, vemos que España es una sociedad más individualista y más orientada hacia valores masculinos que Chile.

El sitio ClearlyCultural.com tiene una serie de mapas del mundo mostrando los puntajes. Por ejemplo este es el mapa de distribución del índice de distancia de poder (más rojo significa más desigual):





Queremos dejar de arrastrar los pies

Vivimos en un mundo en que hay igualdad de oportunidades. Todos comienzan al pie de la escalera, y van subiendo por sus propios méritos o por que es su destino. Todos pueden llegar arriba de la escalera, y el que es pobre es porque no se esfuerza. Hay países ricos debido a que tienen gente trabajadora, y países pobres debido a que su gente sólo se dedica a cantar y bailar. Y si hay desigualdad, es porque el destino ha decidido favorecer más a algunos que a otros.

Nosotros disentimos. Nosotros sabemos que un mundo justo está aún por venir. Nos hemos ido moviendo hacia él durante miles de años, paso a paso. Primero los esclavos. Luego los obreros. Luego las mujeres.

Pero los que tienen muchos privilegios los quieren conservar, y nos hacen arrastrar los pies.

Queremos dejar de arrastrar los pies >>.

No llamamos a sacar a los poderosos de sus mansiones y colgarlos en la calle. Y no es que algunos no se lo merezcan. Es que nosotros ya no somos tan imbéciles.

Tampoco dejaremos de recibir su dinero. Porque esa riqueza fue el fruto de nuestro trabajo, y no podemos vivir sin ella.

Pero no creeremos más en sus mentiras. Ni en sus enemigos fantasmas. Ni en la jerarquía moral de las razas. Ni en el bien contra el demonio. Ni en mil amenazas que nos acechan y que claman por su protección.

No apoyaremos más sus guerras. Porque éstas son sus guerras, no nuestras. Que vayan ellos. Que pongan a sus hijos adelante.

No creeremos más en sus mentiras. Sabemos que en la escalera no partimos todos iguales. Lo vemos todos los días. No somos estúpidos. Y eso no es la mano de dios distribuyendo los dones del mundo. Es el abuso perpetrado por el que puede abusar e inclinar la balanza en favor de los suyos, en contra de todos los demás.

La riqueza del mundo es fruto de nuestro trabajo. Queremos nuestra tajada. Una grande. Una justa.

Queremos crear más riqueza y terminar con la miseria, pero no queremos dejarnos chantajear por los que nos piden nuestra sangre y privilegios a cambio de generar riqueza con nuestro trabajo.

Queremos recibir mejor educación. Eso nos hará menos dependientes. Así podremos negociar nuestra tajada mejor. Así no tendremos que darles tanto a los que nos organizan, a los que nos mandan.

Por eso los que tienen privilegios tienen miedo de las universidades: porque le estamos enseñando a la gente a mandarse sola.

No vamos a dejar que nos usen para explotar y hacer sufrir a otros, ni siquiera a cambio de dinero, ni siquiera si es la costumbre. No nos pondrán los unos contra los otros. Ya estamos grandes.

Vamos a ser felices. La autoridad ilegítima nos hace sufrir. Los privilegios mal ganados nos hacen sufrir. La miseria nos hace sufrir. Las prohibiciones absurdas nos hacen sufrir. La suciedad nos hace sufrir. El temor y la guerra nos hacen sufrir.

Nos hemos vendido a cambio de que nos manden y nos den seguridad. Estamos aprendiendo a organizarnos sólos. Nos las arreglaremos. Y no pagaremos por protección. No repetiremos la estupidez de una guerra continental, de una guerra entre culturas. No lo aceptaremos.

Creen que sin miedo no trabajaremos. No es cierto. Trabajamos porque queremos ser más, porque todos quieren ser más. Sino, no existirían tantos estudiantes.

Creen que sin prohibiciones los placeres nos atraparan. No se preocupen por nosotros. Ya estamos grandes.

No permitiremos que el poder se siga concentrando. Y no nos referimos a los gobernantes oficiales. Sabemos que su función es atraer las balas si algo sale mal. Nos referimos a los que tienen el dinero.

No permitiremos que el poder se siga concentrando, y para lograrlo, vamos a crear conocimiento y arte para todos. Creceremos creando abundancia, no creando escasez para que el beneficio de pocos.

Cada cosa de las que necesitamos, llevará cada vez más conocimiento y arte y cada vez menos tierra y dinero. Mientras más libre sea el conocimiento y el arte, menos valioso será el dinero, y más abundantes las cosas.

Y creceremos juntos hasta que no necesitemos aceptar más el chantaje de pocos.

Y creceremos juntos hasta que todos podamos disfrutar de esa riqueza.

Y lo haremos, lo estamos haciendo, en pocas generaciones. Lo haremos rápido, porque no podemos seguir esperando. No arrastraremos más los pies. No dejaremos que el pasado nos impida ir hacia el futuro.

En pocos años más nuestra raza alcanzará un peak de población y luego se reducirá a una cantidad más apropiada para el tamaño y los recursos de nuestro planeta.

Mientras tanto, no dejaremos que nuestras riquezas queden en manos de pocos. Lo haremos compartiendo con otros lo que aprendimos. Lo haremos sin parar, sin demorarnos, sin arrastrar los pies.

Avanzaremos aprendiendo a organizarnos, exigiendo lo que es nuestro y haciéndonos más libres. Como estamos haciendo ahora. Como hemos hecho siempre.


Fotos: Kris, Caliope, MTSTrading, Fifila: Flickr // Creative Commons.

Reporte de Viaje desde Chile

El Reporte de Viaje de Chile 2007 está listo y disponible. Esta vez y tal como me pidieron varios, he escrito un poco más de detalles sobre los lugares.

En Agosto del 2007 viajé a Chile por vacaciones; fueron cinco semanas muy intensas incluyendo un par de semanas de trabajo y tres semanas de vacaciones con amigos y familia. Al principio siempre estoy nervioso por todo el tiempo que ha pasado sin vernos, pero despues de un momento uno se siente de nuevo en casa muy pronto más >>

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