Santiago de Chile

The contrasts in Santiago de Chile: a colonial church and a modern building across the street.

New version of this website

Today I divided this site into two parts: a blog and a research site. Please let me know if there´s something wrong, mistranslated, or just weird :-)

Nueva versión de este blog

Hoy dividí el sitio en dos partes: un blog y un sitio de investigación. Ambos están en marcha blanca.

Todos por Sobre el Promedio

En el libro "The winner-take-all society", sus autores Robert H. Frank y Philip J. Cook estudian los motivos detrás del aumento de la disparidad de ingresos en ciertas profesiones. La explicación que sugieren los autores, es que en muchos campos opera un mercado en que la compensación está dada por la posición relativa, no por el rendimiento absoluto.

Por ejemplo, el corredor que gana la medalla de oro en los 100m planos en las olimpíadas recibe una cantidad de dinero (en contratos publicitarios) que es muchísimo mayor que la que recibe el segundo mejor, incluso cuando la diferencia en tiempo haya sido de centésimas de segundo. Este fenómeno también es frecuente en el mundo del espectáculo, en que cientos de miles personas sueñan con ser estrellas millonarias, y sólo unas pocos lo son en realidad.

Otras profesiones recientemente se han unido a esta tendencia, incluídos abogados, ingenieros, médicos y científicos. Lamentablemente, uno de los problemas de este tipo de mercado es que la asignación de recursos que se produce en muchos casos es ineficiente, porque hay demasiada gente con ilusiones exageradamente altas que intenta alcanzar lo que para ellos es inalcanzable — y que sería más útil para la sociedad y para sí mismo haciendo otra cosa.

Por supuesto, mientras más competidores haya, mejor será el resultado de una selección competitiva, pero todo tiene un límite, y hay un punto en que comienzan a entrar muchos competidores que no tienen ninguna posibilidad, que sólo aumentan marginalmente la calidad del resultado, pero que a cambio malgastan su tiempo, sus recursos, y los recursos de otros.

Todos creemos ser mejores que el promedio

Una de las causas de que tanta gente entre en competencias que no puede ganar, es que los humanos tendemos a sobreestimar profundamente nuestras capacidades. Los autores citan varios casos:
  • Una noticia reciente reportaba que más del 60% de los jugadores de básquetbal de la primera división universitaria pensaba que llegaría a entrar a la NBA. Sólo el 5% lo consigue.
  • La mayoría de las personas piensa que son más inteligentes y que conducen mejor que el promedio.
  • Más del 70% de los encuestados entre estudiantes de liceo se consideró mejor que el promedio, y sólo el 2% debajo del promedio.
  • El 94% de los profesores universitarios piensan que son mejores que el promedio de sus colegas.
La explicación es el conocido "Efecto Lago Wobegon", nombrado en honor a un lugar ficticio donde "todas las mujeres son fuertes, todos los hombres son apuestos, y todos los niños están por sobre el promedio".

La explicación desde la siquiatría es aplastantemente simple: pensar que uno es peor que el promedio no nos gusta, por lo tanto, una solución barata es pensar que uno es mejor que el promedio, total, no es tan fácil probar que uno está equivocado.

Consistente con esto, los autores citan un estudio en que se encontró que los pacientes con depresión clínica eran notablemente certeros a la hora de evaluar sus propias capacidades, mientras que la gente sana del grupo de control tendía a tener una proporción significativamente inflada de sus capacidades objetivas.

Este problema se ve exacerbado en nuestra generación, la "Generation Me", que fue educada con máximas como "cree en tí mismo y todo te resultará bien" y con una educación donde la auto-estima ciega (sin importar el rendimiento) se consideraba como un valor importantísimo, mucho más que el auto-control, por ejemplo. Para peor, y como notaba Adam Smith:
El desprecio del riesgo y la presuntuosa esperanza de éxito, no están en ningún período de la vida más activos que en la época en que la gente escoge sus profesiones.
Una gota de realidad en un océano de sueños, creo que no nos vendría nada de mal a algunos. Por otra parte, lo de que todos pueden lograr lo que se propongan es una idea profundamente arraigada en nuestra generación, y no creo que de la noche a la mañana todos la abandonemos. Al menos yo no lo he hecho aún.

The Winner-take-all Society por Robert H. Frank y Philip J. Cook. Penguin Books, 1996.

Contracultura a través de las épocas

El libro "Counterculture through the ages" (2004) de "R. U. Sirius" es un muy breve repaso de un período largo de la historia, que va desde la revolución monoteísta de Abraham, pasando por el Taoísmo y el movimiento hippie entre otros, para terminar en la explosión de la blogósfera.

La contracultura es el abandono, usualmente no violento, de lo que es habitual en una época. Normalmente cada época incluye al menos un par de tendencias contraculturales: una prometeica, tecnofila e iluminada y una anti-prometeica, primitivista y más contemplativa. En nuestra época, estas dos contraculturas son los geeks y el movimiento antiglobalización.

El hecho de que se pueda pertenecer a ambas es una señal, en mi opinión, de que ambos movimientos están siendo ya asimilados dentro del mainstream, contaminando con su carga memética la historia futura, tal como hicieron las contraculturas anteriores, y posiblemente abriendo el paso a nuevas contraculturas.

¿Qué es una contracultura?

De acuerdo al autor, una contracultura:
  • Asigna la primacía a la individualidad a costa de las convenciones sociales y las restricciones gubernamentales.
  • Desafía el autoritarismo en formas obvias como también sutiles.
  • Abraza el cambio individual y social.
Una contracultura es siempre, al mismo tiempo, algo elitista. Toda contracultura es elitista porque parte de la suposición de que un individuo, o un pequeño grupo, puede criticar o proponer alternativas que son tan válidas como las que la sociedad ha escogido. Pertenecer a una contracultura significa, fundamentalmente, no estar conforme. El autor cita a Emerson: "La sociedad en todas partes están en conspiración contra la hombría de cada uno de sus miembros ... el que quiera ser un hombre, debe ser un inconformista.". Gente como la que describe el arquitecto Frank Lloyd Wright:

Decido deliberadamente romper con las tradiciones, para ser más honesto con la Tradición que lo que las convenciones e ideas actuales permitirían. El amino más vital es usualmente el más áspero y normalmente está entre convenciones a menudo convertidas en leyes que deben ser rotas, con la consecuente liberación de otras fuerzas que no soportan la libertad. Así que el romper con esta naturaleza es una cosa peligrosa, pero sin embargo indispensable para la sociedad. La sociedad reconoce el peligro y hace que esta ruptura sea usualmente fatal para la persona que la realiza. No debe ser hecha sin reconocer el peligro y el sacrificio, sin la habilidad de soportar un severo castigo, ni sin la sincera fe de que el fin justifica los medios, ni creo que pueda ser hecha sin todos estos.


Cada contracultura es rechazada por la sociedad en forma violenta primero, pasando por las etapas que describió Gandhi: primero te ignoran, luego se ríen de tí y te odian, luego luchan contra tí, luego tú ganas. Por lo mismo las sociedades avanzadas inventan formas sutiles para inhibir de raíz la aparición de revoluciones y mantener al populacho tranquilo. Guy Debord considera a la aparición de una "sociedad de espectadores" una de ellas:
Una acumulación sin fin de espectáculos - avisos, entretenimientos, tráfico, rascacielos, campañas políticas, tiendas por departamentos, eventos deportivos, reportajes de noticias, tours de arte, guerras extranjeras, lanzamientos especiales - estos hacen un mundo moderno, un mundo en el cual toda la comunicación sigue en una dirección, del poderoso al que no tiene poder... El espectáculo naturalmente produce espectadores, no actores: hombre y mujeres modernos, ciudadanos de la más avanzada sociedad sobre la tierra, que están encantados de ver cualquier cosa que les ofrezcan para ver...
El autor de "Counter Culture Through the Ages", R. U. Sirius, tiene ahora un podcast. Cuando salió su libro le hicieron una entrevistado en BoingBoing. Este libro es muy recomendable.

Páginas

Subscribe to ChaTo (Carlos Castillo) RSS